Testimonio: lector



Mi nombre es Fernando tengo 22 años y estoy casado, la historia que voy a contar es de cuando yo tenia 18 años, mi madre se llama Ana es una mujer de 42 años bajita de estatura morena aperlada algo rellenita pero con un trasero encantador en aquel tiempo ella tenia 38 años, tenemos una familia de 5 personas mi padre, mis 2 hermanos uno mayor que yo y otro menor mi madre y yo

Yo empecé a ver a mi madre con otros ojos ya que una vez en la madrugada me levanté al baño y escuché música erótica, la puerta del cuarto de mis padres estaba entre abierta por lo que me acerqué muy despacio y vi a mi madre con una vestuario muy erótico, traía una tanga negra, un sostén negro de encajes que mostraba todos sus pezones, unas medias negras de encajes, unos zapatos de tacón y bailaba como una prostituta ante la mirada de mi padre, desde esa ocasión vi a mi madre como una mujer, vi que tenia un culo completamente delicioso, me quedé a ver hasta que mi padre la desvistió y empezó a cogerla, desde esa vez cada noche me acercaba a su puerta para escuchar y me di cuenta que muy pocas veces tenían relaciones sexuales por que mi padre sufria de  eyaculación precoz.
Yo me las ingeniaba más para espiar a mi madre, cuando se bañaba y salía de su baño completamente desnuda, yo estaba siempre en la ventana de la terraza observándola y así transcurrió un tiempo, una ocasión mi padre por sus negocios salió de viaje por unos días, una noche antes al acercarme al cuarto de mis padres escuché que discutieron muy fuerte por lo que al partir mi padre tuve que ir a dejarlo yo al aeropuerto, de regresó mi hermano mayor se había ido con unos amigos a pasar el fin de semana a un rancho y mi hermano menor se había ido a casa de unos primos a pasar la noche por lo que me quedaría solo con mi madre, esa noche yo salí con mis amigos a una disco hasta las 2 de la mañana que regresé a casa algo ebrio, al entrar a la casa vi que mi madre estaba bebiendo y escuchando música, estaba algo ebria, me acerqué y le pregunté que como estaba ella me contestó que muy bien, me ofreció una copa y yo acepté nos quedamos platicando y bebiendo alrededor de 2 horas hasta ver que la bebida ya se había terminado.
Mi madre y yo ya estábamos muy ebrios por lo que decidimos ir a dormir al momento de levantarnos de la mesa mi madre se acercó y me dijo, hijo te quiero mucho eres un chico muy guapo, a lo que yo le contesté, tú eres una mujer excelente y muy guapa mamá, en eso nos dimos un abrazo y al momento de querer besarle la mejilla mi madre sin querer volteó la cara y nos besamos en la boca, al separarnos nos quedamos viendo fijamente y yo decidí volver a besarla y ella me correspondió, subimos las escaleras abrazados y ella me invitó a dormir en su recamara, al entrar a su recamara ella puso música muy erótica y me dijo que me recostara en la cama, sacó algo de su cajón y entró al baño a los 3 minutos salió envuelta en una bata y me dijo.
Por fin vas a ver de cerca lo que siempre has visto de lejos desde esa ventana (apuntando hacia la ventana de la terraza) y me quedé sorprendido al ver que mi madre sabia que yo la espiaba por la ventana, se acercó y se quitó la bata traía una tanga roja y una sostén rojo de encajes transparentes con unas medias rojas empezó a bailar y amoverse muy erótica, yo estaba completamente tieso tenia la verga completamente parada poco a poco se acercó y se inclinó, abrió las piernas, y ni lerdo le metí mi verga hasta los huevos, ella me susurró: necesito que me des cada vez un poco más rápido, ella gemía de emoción y decía, así, más rápido mi rey, cogeme, cogete a tu madre que ahora es tu putita, así mi rey, que rica verga tienes mi amor, en lo que ella me decía eso yo la cogía cada vez más rápido, hasta que ella me dijo, quiero sentir tu verga dentro de mi culito quiero que me la metas por atrás.
Yo saqué mi verga de su concha y ella se volteó quedando completamente empinada y con sus nalgas tan ricas apuntando hacia a mí y su ano completamente despejado, le dije que antes de meterle la verga quería lamer su ano, ella me dijo que por favor lo hiciera, que nadie nunca le había lamido el ano, empecé a acariciar su ano con mi lengua y al mismo tiempo metía los dedos en su concha, ella estaba completamente mojada y me decía, así papacito que rico nunca nadie me a lamido la cola se siente delicioso, en eso separé la cara de su cola y acerqué mi verga la apunté en su ano y empecé a meter la punta, ella empezó a gritar y me decía, así metémela más, metémela toda Ohhhhhhh, así, en eso yo de un solo golpe se la metí toda, ella exclamó, aahhh!! Papito que rica verga tienes mi hijito, ahhha, así ahhh.
Empecé el mete y saca despacio y cada vez más rápido, ella estaba gozándolo cada vez más hasta que no aguantó y gritó ahhhhh me estoy viniendo mi amor, ¡ahhh! y le vino un tremendo orgasmo que se empapó toda, noté que lloraba un poco de dolor y de placer a la vez por que al mismo tiempo reía de gusto yo seguí embistiéndola hasta que no aguanté más e hice erupción dentro de su culo, ella me decía si, si, lléname el culo de tu semen, inúndamelo todo, yo aventaba y aventaba semen, nunca había aventado tanto como esa vez, saqué mi verga de su cola y me recosté a un lado de ella se quedó acostada boca abajo con su culito apuntando hacia arriba yo me acerqué y ella se volteó y nos dimos un beso en la boca, sin decir absolutamente nada nos quedamos dormidos.
A la mañana siguiente desperté y ella dormía aún, estaba completamente desnuda al igual que yo. quería acercarme y nuevamente empezar a besarla y a acariciarla pero me daba miedo ya que no sabia cual iba a ser su reacción debido a que cuando lo hicimos estaba completamente ebria y tal vez ahora que estuviera sobria iba a arrepentirse. en eso ella despertó y me dijo, hola ¿como amaneciste? yo le contesté muy bien ¿y tú? ella me dijo, excelente mi amor gracias por complacer a mami fue una noche muy especial, yo le contesté que no me agradeciera que al contrario que esto para mí había sido lo mejor que me había pasado se acercó y me besó en la mejilla después se levantó y me dijo que se ducharía que si no quería acompañarla, yo encantado acepté, le pregunté, tú me veías cuando te espiaba, ella me contestó que si y yo le pregunté que por que nunca me había regañado o dicho algo, ella contestó que de alguna manera eso la hacia sentirse deseada y que le gustaba.
Ella se levantó y dijo que se ducharía y me invitó a que nos ducháramos juntos yo encantado acepté, nos metimos a bañar ella empezó a acariciarme la espalda yo volteé hacia ella y empecé a besarla en la boca ella me correspondió y empezamos a acariciarnos todo el cuerpo poco a poco ella empezó a bajarse hasta llegar a mi verga y empezó a chuparla, en verdad nadie me la había mamado como mi madre, ella se levantó y me dijo que fuéramos a la cama otra vez, completamente mojados nos recostamos sobre la cama, ella me abrazaba muy fuerte y me decía que no me separara de ella yo estaba completamente suelto arriba de ella, en eso escuchamos que llegaba alguien yo me levanté rápidamente y me fui corriendo a mi cuarto, mi madre se metió nuevamente a la ducha, era mi hermano menor que había llegado.
Mi madre salió de su cuarto como si nada hubiera pasado yo igual, desde esa vez lo hacíamos cada que teníamos oportunidad, durante 4 años mi madre y yo hemos sido amantes yo me casé debido a que embaracé a mi novia pero aún casado de vez en cuando le hago visitas a mi madre o ella me llama cuando se encuentra sola, mi mamá ha sido y es la mejor amante que he tenido…

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